Después de un día agotador en su nueva facultad, Marina Golds estaba deseando darse un puntapié y relajarse en su nuevo dormitorio.Poco sabía ella, su nuevo compañero de piso tenía otros planes.Cuando entró a la habitación, se encontró con la vista de su impresionante hombría de sus nuevos roomies.A pesar de su shock inicial, Marina no pudo resistir el atractivo de la gran polla que tenía frente a ella.Con una sonrisa pícara, se dejó de rodillas y comenzó a trabajar su magia.Después de una sesión de garganta profunda que la dejó atragantada, Marina estaba lista para más.Invitó a su nuevo amigo a que la tomara por detrás, iniciando un encuentro caliente que los dejó a ambos sin aliento.A medida que el calor se corría, se trasladaron al sofá, donde Marina tomó el control con ansías, montando a su nuevo compañero como una profesional.La intensa sesión continuó con Marina inclinada, permitiendo una penetración aún más profunda.Con cada embestida, su pasión solo creció, culminando en un clímax satisfactorio que los dejó ambos gastados.